La semana estuvo marcada por el trascendido que en una reunión privada entre los presidentes de Chile y Argentina, Sebastián Piñera y Mauricio Macri, se habría zanjado un nuevo itinerario para el túnel de Agua Negra. El hecho difundo por un artículo del diario El Mercurio, provocó incomodidad en el oficialismo, sobre todo en el entorno de la intendenta regional, Lucía Pinto, quien salió a admitir que desconocía el hecho. La misma inquietud existe entre los parlamentarios del Gobierno. Es así que el legislador y ex intendente, Juan Manuel Fuenalizada y el propio Sergio Gahona, solicitaron explicaciones al Ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine.
En privado se reconoce que se trata de una de una definición de alto nivel y estrictamente política, sobre todo por el lado argentino. Es conocido que uno de los grandes impulsores del túnel es el ex gobernador de San Juan y actual diputado nacional, José Luis Gioja.
En el último tiempo Gioja igualmente se ha convertido en uno de los mayores críticos del mandatario argentino. De hecho, aún es recordado el episodio cuando en noviembre de 2016 en un acto partidista lo trató de “boludo” y debió salir a pedir disculpas, luego que el insulto fue grabado y subido a las redes sociales.
Para Gioja el tema del túnel se ha transformado en un motivo de vida y en su última visita a La Serena a finales de febrero de 2018 cuando aún gobernaba la intendencia Claudio Ibáñez, insistió que no había vuelta atrás. “El tema del túnel ha sido un sueño no sólo nuestro, sino que también de los coquimbanos y sanjuaninos”, refrendó en entrevista que concedió a diario El Día en aquella oportunidad y que hoy reproducimos en medio de la actualización de la polémica por el túnel.
Gioja utilizando una metáfora recalca que el proceso integrador entre Chile y Argentina lo soñaron, “O’Higgins y San Martín y no es tema mío o de nadie. Porque Argentina y Chile son hermanos, lo mismo que San Juan y la Región de Coquimbo. En el pasado la cordillera de Los Andes nos unía por la transhumancia, veranadas y todo eso existía antes de que fuésemos república. Entonces no se puede ir contra la corriente. Hay que favorecer la integración, por eso que alguna vez dije que la cordillera debe unirnos y no separarnos. Hay que perforarla para que no sea obstáculo”.
-¿Encontró muchas piedras en el camino para sacar esta obra?
“Sí, lo más complicado es demostrar (viabilidad del proyecto). Un gran amigo como el senador Zaldívar (Adolfo), que después fue embajador (falleció) me indicaba que lo pensaba igual al canal de Panamá. Porque si uno mira un plano de Sudamérica ve Coquimbo en el Pacífico y Puerto Alegre en el Atlántico y son dos polos de desarrollo importante. Por qué no unirnos, faltan 14 kilómetros y eso es el túnel que hay que hacer y por qué no concretarlo. El BID tiene fondos para integrar países, provincias y por qué no usarlo para eso. Estaba cantado que había que hacerlo. Empezamos a decir que este tipo está loco, un túnel a 4 mil metros de altura, está loco, pero hoy la tecnología, permite todo eso. Se ha hecho, un proyecto increíble, porque tengo algún conocimiento, por mi formación profesional”.
-¿El proyecto lo sigue monitoreando día a día?
“Sí, porque esto ya dejó de ser una cuestión partidaria, de Coquimbo o de San Juan para pasar a ser de Chile y Argentina, una cuestión de Estado y latinoamericana también, porque igualmente está Brasil y Paraguay. Creo que se produce una integración perfecta”.
-¿Con los cambios de Gobierno, sobre todo en Chile, cree que se detuvo el esfuerzo por el túnel?
“Creo que esto se ha tomado como una cuestión de Estado, hemos avanzando con distintas alternativas (políticas). Pero, también ha ocurrido en San Juan, siempre hay cambios y hay que amoldarse a las circunstancias y tener en claro que las cuestiones de estado no tienen que ver con las cuestiones partidarias. Y en esas banderas, está la integración y Agua Negra”.
-¿De acuerdo al monitoreo que ha realizado, en qué etapa se encuentra el proyecto?
“Hay que calificar empresas, porque es una obra compleja. No puede venir un tipo que tiene cuatro máquinas y ha hecho 100 metros de túneles a decir que hará uno de 14 kilómetros a 3.900 metros de altura. No, tiene que tener demostrada la experiencia en hacer túneles complejos como este. Pero, técnicamente será lo mejor. En Latinoamérica sacando el canal de Panamá será la obra de ingeniería más aplicada y en cuanto a túneles será la mejor del mundo. Técnicamente están resuelto todos los problemas que ha habido. Entonces, la empresa que gane la licitación, cuánto va a demorar, 8 años. No puede ser que haya un imprevisto, por eso la precalificación de empresa es importante. Después que demuestren técnicamente que son capaces de hacer la obra, bueno que coticen. Por lo que estamos en la parte final de la precalificación, espero que no haya ningún inconveniente. Bueno, después a esas empresas que precalifican se les entrega el pliego y ahí cotizan”.
-¿Todos los días sueña para participar de esa inauguración y colocación de la primera piedra?
“Bueno, llegaría a pata, caminando a la inauguración del túnel, son 14 kilómetros”.
-¿Pero, cuanto faltaría para que se coloque la primera piedra?
“Siendo medianamente optimista, en estos tiempos hay que precalificarse y a mitad de año presentar ofertas y en 5 a 6 meses ver qué oferta es la mejor y creo que a fin de año deberíamos estar adjudicando el contrato y empezando. Siempre dije que con un taladro empezaríamos a perforar la cordillera, pero en esa fecha habría que empezar a realizar campamentos que es la previa a realizar la obra”.
-En Chile ha resurgido el debate por los puertos y por donde se debiera sacar el volumen de carga que se proyecta con el túnel, sobre todo cuando se admite que el puerto de Coquimbo no daría abasto, ¿cómo enfrenta este tema?
“A ver, no me quiero meter en la política chilena, pero lo que sé que esto le conviene a Chile y a la región de Coquimbo, San Juan y a Argentina. Entonces, los problemas se irán resolviendo. Siempre hay que ir del problema mayor al menor. El mayor es hacer el túnel y cuando ocurra iremos resolviendo el resto de los problemas”.
-¿O una nueva carretera que está pidiendo Vicuña en el Valle de Elqui, para evitar que pasen los camiones por las localidades?
“Habrá que hacerlo, nosotros nos animamos e hicimos un camino de unos 70 kilómetros que es Ichigualastos- Jachal y es una autopista. Obviamente de Jachal a Las Flores que es el otro tramo hay que hacerlo de nuevo y se concretará y será autopista, no tengan dudas”.
-¿Pero, llamaría a las autoridades chilenas a preocuparse por las obras complementarias?
“Están preocupadas, tienen que haber planificado. Hay que avanzar con el túnel, son 9 años de construcción para terminar y me parece que en ese lapso hay que ir acomodando el resto y el complemento”.
-¿En su caso está llamando constantemente a la casa Rosada en Argentina para que no se caiga el proyecto?
“Sí, además tengo un Gobernador en la Provincia que es mi compañero y amigo que fue mi vicegobernador (Sergio Uñac) y tiene claro que esta obra es la más importante y desde el intendente Ibáñez (Claudio) hasta el que venga (actualmente la intendenta es Lucía Pinto) y los que pasaron todos han trabajado (por el proyecto) y en todos he visto una intensidad por la obra que a mí me repotencia”.
PESADA LA PISTA
-¿El Gobierno de Mauricio Macri ha sido las expectativas que su sector tenía?
“La verdad que no, se ha puesto pesada la pista, porque veo que muchos derechos de mis compañeros y conciudadanos se están cercenando. Cuando veo que quien maneja la energía es un representante de los grupos empresarios del sector y nuestro pueblo tiene que pagar tarifas desmedidas me siento con mucha angustia. Cuando le bajan el sueldo a los jubilados creo que se están perdiendo derechos. Al advertir que ese sector que está gobernando es muy cerrado y lo hace para pocos la verdad es que me preocupa y mucho. Pero, hay que remar, trabajar y defender la democracia siempre, pero en el rol que el ciudadano nos puso. En el país, la ciudadanía nos puso de opositores y en ese sentido tenemos que velar por las convicciones y derechos de los ciudadanos, en eso tenemos que ser innegociable. La política de endeudamiento permanente”.
-¿En el estilo del Gobierno de Mauricio Macri, hay un símil con Chile, donde retornó al poder el empresario derechista Sebastián Piñera?
“No me gusta y no puedo hablar de otras cosas que no he sido actor”.
PROMOVER EL DESARROLLO
-Usted en su tiempo de Gobernador fue criticado por el apoyo a Pascua Lama por el lado argetino, sin embargo, en Chile está el debate por el proyecto Dominga, ¿cómo se concilió el tema económico con el medioambiental?
“Hay que colocar todo sobre la mesa, no puede haber desarrollo que afecte las mayorías. El desarrollo hay que promoverlo, soy un promotor de la minería, pero con empresas responsables y la minería sustentable”.
-Pero, por el lado chileno a Barrick la clausuraron…
“Sí, y respetamos la decisión que se tomó, ahora dicen que harán un proyecto subterráneo, pero la verdad es que no lo sé. Lo que sí sé es que la responsabilidad social-empresarial también tiene que estar arriba de la mesa y estimo que las empresas mineras particularmente tienen que hacer toda una campaña de difusión de lo desarrollado y demostrar que es una actividad legítima y que no complica el medio ambiente”.
MANTENER LAS CONVICCIONES
¿Echa de menos el día a día en la Gobernación de San Juan?
“No, no hay que olvidar que antes de ser gobernador fui parlamentario provincial, diputado nacional y senador nacional, después fui gobernador y ahora nuevamente diputado. La vida me va colocando tareas y con mucho gusto las hago y trato que todos puedan trabajar y que siempre el objetivo central es el que prevalezca. Que el árbol no nos tape el bosque, porque ahí se complica el tema”.
-¿Temió que el grave accidente que tuvo lo privaría de ver cumplido el sueño del túnel de Agua Negra?
“A ver, tantas cosas pasaron (se pone serio), no me caía de una bicicleta como siempre lo digo, pero gracias a Dios me ve sin bastón, sin muletas, silla de rueda y caminando y disfrutando la vida y de las cosas que hago”.
-¿Advierte la vida de distinta forma?
“Sí, disfruto más la vida y los afectos”.
-¿Está menos vehemente y luchador?
“No, nunca hay que bajar los brazos, lo que pasa es que la vida te va colocando límites en la forma de actuar. Antes uno se llevaba por delante algo, pero a uno la vida le va enseñando. Lo que hay que mantener siempre firme son las convicciones y quienes amamos la política con virtudes y errores, siempre hay que colocar las convicciones por delante”.